LA PROTESIS DENTAL HOY:
Un año más, hoy es 9 de febrero y se celebra el día de Santa Apolonia, patrona de los odontólogos y los protésicos. Se volverán a realizar fiestas y ágapes, pero todo sigue igual en el sector de la prótesis dental. Desde la década de los sesenta, ya en el pasado siglo XX, la prótesis dental ha sufrido un cambio radical tanto en materiales como en técnicas de elaboración. Metales como el oro, o el palador han sido sustituidos por otras aleaciones como el cromo niquel o el titanio, y el caucho por polimeros.
Pero en lo referente a la situación laboral de los trabajadores de nuestro sector, el protésico, pese a que se ha pasado de comenzar como aprendices a ser titulados u homologados, y a la creación desde hace ya varios años de un colegio profesional que en teoría nos debería de defender y representar, poco han variado nuestras condiciones de trabajo.
La dependencia total de los laboratorios a que los odontólogos les envien trabajos y así poder rentabilizar sus inversiones hace que la patronal derive sus desdichas hacia nuestras nóminas, las de todas y todos los trabajadores/as que formamos el sector.
El primero compuesto por los llamados mecánicos dentistas, sin titulación ninguna homologados por años y años de trabajo y mayores de 40 años. Este grupo suele escoger el camino menos conflitivo y más peligroso, ya que en vez de enfrentarse a sus patronos para conseguir condiciones de trabajo adecuadas y salarios dignos acorde con sus funciones les hace buscar alternativas que rozan el intrusismo profesional realizando prótesis sin prescripción médica y sobrecargandose de trabajo realizando jornadas abusivas y algunos incluso acompañando a las mismas con largos viajes por carretera lo que supone un peligro tanto para ellos como para quien se cruce en su camino, y todo ello buscando aportar a sus casas, un salario minimamente digno.
El segundo grupo compuesto exclusivamente por jóvenes profesionales muy bien formados pero con poca experiencia profesional, tienen que mantenerse con sueldos de miseria si quieren comenzar a desarrollar su oficio.
Mientras, todos y todas los/as trabajadores/as vemos como los dentistas llenan sus bolsillos cada día, multiplicando hasta por cuatro lo facturado por los patronos protésicos y todo ello a pesar de que ellos no son quienes realizan las prótesis.
Esta situación esta llevando a los jóvenes titulados a abandonar el trabajo para el que se han formado creando una gran carencia de profesionales, al no existir el relevo generacional. Pero todavía hay algo peor en nuestro sector: aquellos patronos, los menos afortunadamente, que no solo pagan sueldos de miseria sino que obligan a que las personas que necesitan trabajar para ellos se independicen y paguen cotizaciones de autónomos.
Tras muchos años y muchas modificaciones el sector protésico dental sigue como antaño, por un lado:
1.- Patronos amedrentados por el colectivo médico-odontológico que no consiguen cobrar por nuestro trabajo lo que realmente vale, manteniendo su estatus social con rebajas en la calidad de las prótesis fabricadas y mal pagando al colectivo de los/as trabajadores/as.
2.- Un grupo de protésicos viviendo en la cuerda floja, actuando al margen de la legalidad, jugandose la vida en carreteras o esperando, cual espada de damocles, denuncias por intrusismo laboral.
3.- Y por otra parte, protésicos que desde la legalidad intentan sobrevivir con salarios de miseria, percibiendo un dinero inferior en muchos casos a profesiones sin ninguna cualificación lo que conlleva a incrementarse el número de deserciones en nuestra profesión.
4.- Con un convenio colectivo durmiendo el sueño de los justos, desde hace varios años bloqueado por la patronal, y por una representación sindical (OSTA heredera de la USO) que no se preocupa por la situación del sector.
Y ante todo esto ¿que hace el colegio de protésicos?
Un organismo creado en teoría para dignificar nuestro oficio, que fue recibido con grandes expectativas por toda la profesión y que en la actualidad se encuentra denostado entre los trabajadores, gastando el dinero de nuestras cuotas de colegiados/as en homenajes, viajes de sus miembros, dietas etc... Al final la mayoría de los trabajadores han llegado a considerarlo una carga económica más, un impuesto revolucionario no compensado por los empresarios para ejercer nuestra profesión todos los días.
Desde SOA-STA, como organización referente del colectivo, luchamos por la negociación y firma de un convenio colectivo que permita a la clase trabajadora vivir dignamente de su profesión. Nuestro sindicato cree que ha llegado el momento de que los trabajadores protésicos puedan vivir de su trabajo, tiempo de decir basta a la opresión del colectivo médico y de la patronal.
Solicitamos desde nuestro sindicato que se integre en la atención sanitaria pública todo tipo de servicios odontológicos y protésicos dentales, para evitar situaciones como las que viven los trabajadores y sobre todo la población aragonesa al tener que hacer frente a este tipo de gastos que afectan a su salud dental.
Colla Sendical de Protesicos Dentals (Demba de Sanidat)
Sindicato Obrero Aragonés
Sendicato d'os Treballadors y Treballadoras d'Aragón